¿Salvar vidas con RCP? Eso es cosa de niños, dicen los expertos
Por Michael Merschel, ľ¹ÏÖ±²¥ News
Para algunas personas, el sexto grado puede ser demasiado pronto para asumir la responsabilidad de salvar vidas. Pero Riley Clower y sus compañeros de clase en Laramie, Wyoming, no estarían de acuerdo.
El otoño pasado, Riley y algunos de sus compañeros estudiantes en la escuela Laramie Middle School recibieron capacitación en reanimación cardiopulmonar, o RCP, en la Universidad de Wyoming cerca de ellos. Practicaron con maniquís, escucharon canciones que les ayudaron a establecer el ritmo necesario y vieron un video sobre una niña que usó RCP para salvar a su padre.
Los niños aprendieron que hacer compresiones en el pecho era "más difícil de lo que uno cree", dijo la niña de 12 años. "Pero todos nos dimos cuenta que todos podíamos salvar a alguien".
Los expertos en RCP dicen que ella tiene toda la razón. Y lejos de tomar en cuenta la corta edad de ella, ellos dicen que la capacitación en RCP puede ser valiosa no solo para personas de su edad, sino para estudiantes mucho más jóvenes.
"Creo que aprender RCP debe ser casi tan fundamental como aprender a atarse los zapatos y mirar hacia ambos lados antes de cruzar una calle", dijo Alik Matthews, enfermero titulado e instructor de RCP en Buffalo, Nueva York.
La ľ¹ÏÖ±²¥ calcula que cada año en Estados Unidos unas 350,000 personas tienen un paro cardíaco fuera de un hospital, que es cuando el corazón se detiene repentinamente. La RCP, si se realiza inmediatamente, puede duplicar o triplicar las probabilidades de supervivencia. Sin embargo, solo alrededor del 40% de las personas reciben RCP por parte de un transeúnte.
Cuando consideramos que aproximadamente el 72% de los paros cardíacos en adultos ocurren en casa –y alrededor del 80% de niños– "a menudo el primer testigo podría ser de hecho un niño", dijo la Dra. Marina Del Ríos, doctora de medicina de emergencia y profesora asociada de medicina de emergencia en la Universidad de Iowa en Iowa City.
Pero los niños de tan solo 4 años pueden formar parte de la "cadena de supervivencia" después de un paro cardíaco, comentó Del Ríos. Ella fue coautora de una en 2023 del Comité Internacional de Consenso en RCP titulado "Kids Save Lives," o Los niños salvan vidas.
Del Ríos dijo que un niño o niña de 4 años puede aprender que si ve a alguien que se ha desplomado, puede llamarlo por su nombre y verificar si la persona está respirando. "Y luego el próximo paso es llamar al 911, y así involucrar a los servicios médicos de emergencia lo antes posible". Los niños de kindergarten o del jardín de infancia pueden seguir instrucciones de un desfibrilador externo automatizado, que puede aplicar una descarga eléctrica al corazón para restablecer el ritmo adecuado.
Aprender cómo hacer compresiones del pecho puede venir más tarde. "Ya para cuando tengan 10, 11, 12 años, es posible que tengan suficiente fuerza corporal para lograr la profundidad y el ritmo correcto", dijo Del Ríos. La profundidad de las compresiones del pecho debe ser de por lo menos 2 pulgadas, a un ritmo de 100 a 120 compresiones por minuto.
Más allá de aprender destrezas inmediatamente útiles, comentó Del Ríos, la capacitación para niños pequeños inculca actitudes en ellos que pueden motivarlos a tomar acción como adultos.
"La idea en realidad es convertir a un transeúnte en un rescatador", agregó ella.
Del Ríos comparó la capacitación con la enseñanza de los niños pequeños de "parar, echarse al suelo y rodar" cuando la ropa o el cabello a una persona se incendian.
"Cuando aprendemos cosas durante la niñez, es más probable que llevemos con nosotros lo aprendido a lo largo de la vida", comentó ella. "Entonces, al igual que les enseñamos a los niños a lavarse las manos antes de comer o poner los platos en el lavaplatos, esta es otra tarea que si la aprendes cuando eres niño, es más probable que la lleves contigo a lo largo de la vida".
Los niños no ven una capacitación como algo tedioso, dijo Matthews, quien trabaja con personas de todas las edades. Los niños que ha conocido se involucran de lleno.
"Les encanta participar", dijo él. Les encanta hacer preguntas sobre eventualidades como "qué pasa si", "porque la capacidad de la mente de los niños es inmensa. Son muy imaginativos. Y muchas veces esta es su primera exposición a este material".
Matthews cree que la mentalidad juvenil de los niños puede incluso ayudarles en una verdadera crisis. En lugar de pararse a pensar detenidamente en lo que está pasando o esperar una instrucción formal, es más probable que actúen, dijo él. "Llamarían al 911 en un abrir y cerrar de ojos". Y eso, comentó él, "puede hacer una gran diferencia a la hora de salvar una vida".
Las clases de RCP deben ser adaptadas a los niños, dijo él. "Hay que simplificar muchísimo las cosas y dirigirlas a los niños. También deben tener mucho, mucho tiempo participando en actividades prácticas que los mantengan interesados". Si tratas de hablarles todo el tiempo, dijo él, "se van a aburrir, quedarse dormidos y pierden el interés. Pero si los mantienes involucrados, son muy receptivos".
Es buena idea ajustar la lista de canciones, el "playlist", para enseñarles el ritmo adecuado de las compresiones. Los estudiantes de la época de disco es posible que sepan que la canción "Stayin' Alive" de los Bee Gees funciona, pero Matthews y su equipo usan música diferente para los niños. "El mayor éxito, por mucho, es 'Baby Shark'".
Los niños y adolescentes también son excelentes promotores de las capacitaciones. Tanto Matthews como Del Ríos dijeron que cuando enseñan en sesiones comunitarias, muchas veces son los niños los que atraen al resto de la familia.
Los niños mayores y los adolescentes, a menudo le piden a Matthews que tome fotos y videos de ellos en acción para compartirlos en las redes sociales.
"A esta generación de niños les encanta colaborar y darse a conocer", dijo él. Algunos de ellos se aparecen a una clase porque pensaban que sería algo genial para publicar, "y terminan aprendiendo y compartiendo lo que aprendieron. Y luego más y más niños vienen a la clase después de eso".
Del Ríos dirigió un estudio en una de las escuelas preparatorias o secundarias en Chicago que demostró cómo cada estudiante de 9p o 10o grado al que se le enseñó RCP, terminó enseñando la técnica a un promedio de otras cinco personas. Otros investigadores obtuvieron resultados similares. A medida que más estados requieren capacitación en RCP en escuelas preparatorias o secundarias, dijo ella, ese "efecto multiplicador" puede convertirse en una "herramienta increíblemente poderosa para difundir los conocimientos de RCP".
En Wyoming, la escuela de Riley se benefició justamente de esa manera.
Anne Moore, maestra de educación física, dijo que Riley fue seleccionada junto con otros cinco estudiantes de la escuela Laramie Middle School para asistir a una actividad de niños saludables llamada "Healthy Kids Roundup" en la universidad. Estudiantes de todas partes del estado dedicaron un día a aprender actividades saludables, desde preparar meriendas, o bocadillos, hasta a jugar pickleball. Luego, trabajaron con sus maestros para seleccionar las mejores experiencias para una noche de ejercicio físico familiar en sus escuelas.
Cuando Moore les preguntó a los estudiantes de Laramie cuáles actividades les interesaba duplicar, todos inmediatamente le dijeron, "'¡Tenemos que hacer RCP!'" dijo ella. "Esta fue la actividad número 1 en sus listas".
Riley dijo que la RCP no había sido una prioridad para ninguno hasta que tuvieron la experiencia en la universidad. "Y entonces dijimos, 'Ah, aprender RCP es mucho más importante de lo que uno cree'". Pensaron que sus amistades y familias estarían igual de interesadas.
La actividad que ellos crearon atrajo entre 300 a 400 personas, dijo Moore. La hicieron para que fuera una capacitación completamente práctica en RCP y recibieron la ayuda de bomberos locales que se ofrecieron de voluntarios para ayudar. La escuela también vio un video creado por el sobreviviente de un paro cardíaco mejor conocido en Estados Unidos, Damar Hamlin, el jugador de los Buffalo Bills, quien se desplomó durante un juego de la NFL en enero de 2023.
La ciudad de Laramie siente una conexión con el equipo. "Somos enormes fanáticos de los Buffalo Bills aquí", dijo Moore, porque el mariscal de campo, Josh Allen, fue jugador estelar en la universidad. Riley dijo que su papá y hermano estaban viendo el partido de "Monday Night Football" cuando tuvieron que revivir a Hamlin porque su corazón se le paró.
Riley, a quien le interesa ser pediatra u otro tipo de médico, dijo que ella espera que nunca tenga que usar RCP. Pero que si surge la necesidad, Riley dijo que ella y sus compañeros están listos.
"Sabemos que somos lo suficientemente fuertes para hacerlo", dijo ella. "Así que sabemos que podemos salvar a alguien".
Moore mencionó que se ha planificado otra actividad de RCP en la primavera, gracias a la ayuda de la universidad.
Del Ríos dijo que para involucrar a más estudiantes, las escuelas necesitan ese tipo de apoyo, es decir, de los gobiernos, los servicios de manejo de emergencias y las organizaciones comunitarias y filantrópicas. La mayoría de los estados ahora requieren que los estudiantes aprendan RCP antes de graduarse de preparatoria o secundaria.
El entusiasmo juvenil definitivamente puede ayudar a mejorar las probabilidades de que una persona que observa una situación se convierta en rescatador, dijo ella.
Los niños merecen recibir más reconocimiento, agregó Del Ríos. "Esto les está otorgando el poder y la posibilidad de salvar a un ser querido".