¿Emergencia de salud? No vacile en obtener ayuda
Por ľ¹ÏÖ±²¥ News
Ahora que los hospitales en todo Estados Unidos se enfocan en personas que contrajeron COVID-19, personas con problemas de salud no relacionados pero urgentes se sienten incómodas para acudir a las salas de emergencias.
Los médicos dicen que no ser así.
Es cierto que el coronavirus está abrumando el sistema médico. Los hospitales cancelan o posponen las cirugías electivas y toman otras medidas para asegurar que puedan atender a pacientes que desarrollen casos graves de COVID-19. Los médicos también indican que todos pueden ayudar a aliviar esa presión buscando formas alternativas de atender sus situaciones de rutina.
Sin embargo, las personas con síntomas serios no deben ignorarlos, dijo la Dra. Sarah Perman, profesora asociada de medicina de emergencia en la Facultad de Medicina de la Universidad de Colorado en Denver.
Los proveedores de servicios médicos de emergencia saben qué hacer, añadió, aunque parezca que están en caos. Tras bambalinas, esos departamentos tienen planes para asegurar que haya personal adecuado y para mantener seguros tanto a pacientes como a empleados cuando suba la actividad.
"Es realmente nuestro punto fuerte", dijo la doctora. "Todos tenemos capacitación para atender desastres".
Al trabajar en la sala de emergencias durante estos días, también escuchó a personas con necesidades urgentes disculparse por acudir a este servicio, diciendo cosas como "sé que están muy ocupados" y pensando que tal vez no deberían pedir ayuda.
Eso es un error, dijo.
De hecho, su consejo en cuanto a quién necesita atención de emergencia en estos momentos no "es muy distinto de lo que sugeriría hace un mes. Es claro que síntomas peligrosos y conocidos como dolor de pecho, falta de respiración súbita, debilidad aguda en un brazo o pierna, ese tipo de cosas" requerían atención de emergencia anteriormente, ahora lo siguen necesitando.
Eso no significa que la gente no deba adaptarse a esta situación que cambia constantemente y que puede variar de comunidad en comunidad. (Asegúrese de buscar un para enterarse de la información del momento).
David Eisenman, del Centro de Salud Pública y Desastres de la Universidad de California, Los Angeles, dijo que las personas con preocupaciones continuas como enfermedades cardíacas necesitan continuar consultando con sus médicos y otros profesionales clínicos. Al igual que antes de la pandemia, esos pacientes también deben reportarse si cambian sus síntomas.
Lo distinto es que quizás no se haga en persona. Algún profesional médico, como doctor, enfermera especializada, asistente de médico, enfermero registrado, podría sugerir que la consulta se lleve a cabo por video o por teléfono.
No existe motivo para pensar que las salas de emergencia dejarán de atender pacientes aun cuando aumenten los casos de coronavirus, añadió. "De hecho, conforme avanzamos con la pandemia en este país, es probable que los pacientes con COVID queden instalados en áreas completamente distintas a la sala de emergencias".
Aun así, Eisenman dijo que los estudios de otros tipos de desastres sirven de advertencia. Por ejemplo, después de los grandes terremotos suelen aumentar los ataques del corazón y otros problemas cardíacos.
"La gente se enferma y muere mucho después de un desastre debido a que no pudo atenderse, posiblemente a causa del estrés, o quizás por las pérdidas de apoyo social u otros motivos".
La causa exacta de las muertes que ocurren después de los desastres no es clara, dijo. Y, hasta ahora, la pandemia ha sido diferente de los desastres en los que los servicios esenciales quedan destruidos.
"Las farmacias siguen abiertas", dijo Eisenman. "La gente no perdió sus medicamentos en una inundación o terremoto, pero quizás tengan miedo de ir a la farmacia o al consultorio de su médico".
Perman enfatizó que debemos hacer a un lado el miedo de convertirnos en una carga.
Si alguien tiene un síntoma o molestia que persista o empeore de alguna forma y que lo hace "pensar que quizás deba revisárselo, podría tratarse de un síntoma que podría comunicarle a su médico principal, o a su cardiólogo o neurólogo primario". Ellos pueden decidir cómo y dónde debe atenderse.
Pero, si siente las señales de advertencia de un ataque del corazón o de , llame al 911, indicó. "Claramente, si se trata de una emergencia, estamos a su alcance y con capacidad y disposición para hacernos cargo de usted".
Nota del editor: Debido a los eventos en rápida evolución que rodean el coronavirus, los hechos y consejos presentados en esta historia pueden haber cambiado desde su publicación. Visite Heart.org para obtener la información más reciente y consulte con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y los funcionarios de salud locales para obtener la orientación más reciente.
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